Dado el tiempo transcurrido desde que han tenido ingreso parlamentario municipal distintas iniciativas tendientes a poner en un lugar de mayor dignificación a los trabajadores municipales y atento la falta de voluntad explícita del oficialismo de tratar las mismas es un deber para el suscripto informar lo acontecido, con el objeto de no ser cómplice en la falta de resolución de estas cuestiones.

Efectivamente desde hace 2 años y medio presenté un proyecto de Ordenanza para adherir al sistema del sueldo mínimo, vital y movil, con el objeto de que cada vez que este se incremente automáticamente se actualice el mínimo municipal.

Hace más de un año presenté otro proyecto para eliminar topes irritantes en el pago de las asignaciones familiares. Ocurre por ejemplo que si un agente percibe más de $ 2800 se le reduce el monto por hijo de $ 270 a $ 204.

Hace más de 3 meses que presenté un Proyecto de Ordenanza para adherir a la Ley de Paritarias de la Provincia con el fin de que exista un sistema ineludible de tratar y convenir condiciones de trabajo y salariales en el ámbito municipal.

Todas estas iniciativas no han sido siquiera tratadas por el oficialismo municipal en el Concejo, ni por la positiva ni por la negativa.

Y eso que todas ellas constituyen propuestas concretas reclamadas por todas las organizaciones sindicales municipales y centrales obreras en la provincia y en el país.

Y toda esta falta de respuestas en una etapa económica que lo posibilita. Se está perdiendo una brillante oportunidad de mejorar en serio la condición del trabajador municipal.

Es que no bastan los discursos, los trabajadores merecen y esperan respuestas concretas.